sábado, 25 de septiembre de 2010

Día 16 y 17

¡Hoooola! Hoy, después de levantarme y de desayunar he ido a poner la lavadora y ¿cómo no? , la he vuelto a poner mal. En principio estaba muy emocionada porque había conseguido que la secadora durara solo 1 hora y pico en vez de 2. Pero no, las horas pasaaaban y pasaaban y cada vez que miraba cuanto faltaba, quedaba más de lo que quedaba la vez anterior. Así que he tenido que dejar la secadora puesta y también he tenido que dejar el portátil porque hoy venía el técnico. Me he ido súper agobiada a comer con estas y rápidamente me he ido a una clase de cine, a ver si me gustaba para cogerla o no como asignatura. Bueno, pues creo que ha sido lo peor que he hecho desde que he llegado a este país. ¡Es que tiene narices! La asignatura no trata del cine, en general, si no del cine de Japón y de Korea y buahhh, insisto ha sido horrible… Pero lo mejor es que la asignatura trata de analizar una peli. ¿Qué qué peli? The host. Nunca pero NUNCA la veáis porque ahora fuera de coña me ha creado trauma. Suena a broma pero trata de un calamar gigante que se come a la gente. De verdad que era de miedo. Además el calamar vive en un río y Angers es una ciudad dividida por uno, ¡se me ponen los pelos de punta con solo pensarlo! Evidentemente, esa asignatura no la pienso coger. Después he ido a la resi, he cenado y he salido un ratito de bares, nada interesante. No se si es el alcohol de esta ciudad o yo pero me he tomado dos chupitos y una cerveza y como si fuera agua. Os quieroooooo!
¡Hooooola! Aunque ayer no llegamos muy tarde, me he levantado directamente a la hora de comer, así que he ido a la uni que había quedado con ellas y hemos ido al comedor universitario a comer. Hemos hecho más papeleo de lo de la caf y después un poco de compra. Bueno, aunque quede muy en ridículo contaré mi momento de esplendor. Estábamos comprando alcohol, cuando he visto que había negrita y obviamente me he emocionado. Vale, hasta ahí todo bien. Me he fijado en el precio y también me he emocionado porque cuesta como en España, pero de tanta emoción las he dicho sin fijarme“ Buah! Es que está fenomenal, hasta te viene con vaso!” Sonia y María han empezado a mearse de risa y María me ha dicho “peeero, si es la alarma”. Me he girado y he visto que toooooooodas las estanterías con toooodas las bebidas de alcohol tenían “el vaso”. ¡Que vergüenza! Todo el mundo nos miraba porque no podíamos parar de reírnos. Ahora suena tonto decirlo, pero de verdad que parecía un vaso…. He cenado y después hemos ido a la resi de Rosella, la italiana, que por cierto es guapísima. Hemos bebido con ella y con su vecino de la resi que es francés mientras hablábamos un popurrí de idiomas. El chico es súper simpático y ha dicho que va a intentar invitarnos a una fiesta de su uni. Después hemos ido al doremi (la discoteca) en el bus. Rosella y yo hemos oído perectamente como un chico devolvía en un cubo dentro del autobús. Pobrecito, le han hecho bajarse del autobús para tirar el devuelto del cubo, pero después ha vuelto a subir. Ha sido muy gracioso-asqueroso. Hemos bailado mucho, una chica en el baño nos ha preguntado a María y a mí que si éramos pareja. No sabíamos si de verdad nos quería preguntar eso o que no entendíamos bien el francés. Hemos cantado en el karaoke la de “1,2,3 un pasito pá lante María” y una tipiquísma de Britney Spears, que ahora no me acuerdo. Vuelta a casa y zzzzz.

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