sábado, 25 de septiembre de 2010

Fin de semana 2

Hoy, sábado, me he levantado bastante tarde, así que he bajado directamente a comer. Después he quedado con María para alquilar una peli. La idea es, que cada semana vamos a ver una peli en francés porque ya que no hablamos entre nosotras en francés por lo menos lo escuchamos. No encontrábamos ningún videoclub, así que me he metido en una tienda a preguntar. No entiendo a los franceses. Exactamente nos han dicho “Abajo a la derecha”. Peeero, ¿cuánto de abajo y cuánto a la derecha? Nos hemos metido por varias calles y al final hemos encontrado una tienda rara que las vendían pero a un precio muy barato. Estábamos emocionadas viendo tooodas las pelis cuando el tío de la tienda nos ha dicho que ya habían cerrado. Y efectivamente, ya había echado hasta el cierre. Pero lo mejor viene ahora: el tío empieza a buscar la peli original, no la bajada de internet y como no la encuentra, nos la regala. Como siempre, pensábamos que no habíamos entendido el francés, pero al fin y al cabo, un “cadeau” es un “cadeau”. Así que con la peli regalada debajo del brazo, nos hemos ido a comprar palomitas. Hemos ido a su resi a verla mientras cenábamos y pfff no me ha gustado nada. Era brokeback mountain. Después salimos un ratito al kalypso. Nos sentamos y al poco rato tres tíos se sientan con nosotras, pero ¡pegados! Era una situación bastante agobiante porque no podíamos estar hablando tranquilamente. Entonces le digo a María, “¿sabes lo bueno? Que no importa lo que digamos. Podemos decir caca-culo-pedo-pis que no nos entienden.” Pasa medio segundo y uno empieza a hablar con María y otro conmigo. Éste, intenta hablarme en español. Noto que lo habla bastante bien. Le pregunto que si sabe español. Me dice: llevo 6-7 años estudiándolo. Entonces, lo primero que le digo es “¿y me entiendes si hablo en español?” Respuesta: sí. (ADV). ¡¡¡¡Qué vergüenza por favor!!!! Estuvimos hablando bastante tiempo, pero después me dijo que si me acompañaba a casa, que dónde vivía y lo peor me pidió el móvil. No me lo podía inventar porque me dio un toque para tenerlo yo también. Vuelta a casa con los alemanes. Llego a casa y veo tres mensajes del chico. Dos intentando decirme algo, que no consigo descifrar y el último diciéndome que deseaba que llegara bien a casa.
A la mañana siguiente quedo con María para comer en mi resi, hacemos espaguetis y mientras vemos en la tele una peli que echaban de John Travolta. ¡Qué impresión y que raro se me ha hecho que hablara en francés! María que es tan mona, ha comprado unos pastelitos de postre y estaban buenísimos. Quedamos con Sonia y Patricia y cruzamos al otro lado del río, nos hacemos fotos, nos reimos un montón cuando Patricia llama al postre (dessert) desierto, ojeamos un rastro que ponen en las calles, cenamos en el macdo (como lo llaman aquí), nos hacemos mil fotos, vuelta a casa y otro mensaje del chico de anoche preguntándome que qué tal todo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario